Estimulación inmediata del apetito en perros anoréxicos con el uso de propofol

Autores: Avendaño Carrillo Héctor, Rangel Capitillo Adelaida, Reyes Delgado Fausto, Ramírez Del Pino Gerardo, Avendaño Ávila José Gonzalo

Resumen

La anorexia es una anormalidad que se distingue por la pérdida parcial o total del alimento, o aversión al alimento. Se sugiere que el apoyo nutricional debe ser considerado si la ingesta oral ha sido disminuida de tres a cinco días. En la práctica clínica profesional de pequeñas especies nos enfrentamos a pacientes anoréxicos originadas por múltiples causas (infecciosas, metabólicas, cáncer, dolor, estrés, etc.). El manejo inadecuado de la anorexia independientemente de la etiología clínica, origina consecuencias desfavorables en nuestros pacientes como pérdida de peso, pérdida de masa muscular, inmunodepresión atrofia de las microvellosidades intestinales, déficit en la síntesis de fármacos, etc. El centro del apetito y de la saciedad se encuentra en el hipotálamo lateral y ventromedial, respectivamente. La estimulación o inhibición de estas áreas anatómicas puede producir estimulación o inhibición del apetito. Existen neurotransmisores específicos como el ácido gamma amino butírico (GABA) y la serotonina que realizan funciones específicas en la presentación de la anorexia actuando directamente en el hipotálamo estimulando o inhibiendo el apetito. El propofol (2-6 dihidropropilfenol) es un agente anestésico utilizado ampliamente en medicina veterinaria y humana, estimula al GABA e inhibe a la serotonina a dosis específicas. Es un agente de acción corta con metabolismo hepático y extrahepático y su excreción es renal. Se utiliza para anestesia total intravenosa, inductor de la anestesia general, tratamiento del trauma craneoencefálico, convulsiones refractarias al tratamiento con barbitúricos, tratamiento temprano de emesis posterior al tratamiento con quimioterapéuticos (humanos), etc. Diferentes hospitales y clínicas veterinarias de la República Mexicana participaron en la investigación. Fueron hospitalizados 40 perros de diferentes razas que presentaban anorexia por más de dos días. Se realizó historia clínica, examen físico, pruebas de laboratorio y pruebas diagnósticas complementarias. Se calcularon los requerimientos energéticos y metabólicos dependiendo la enfermedad del paciente. De acuerdo con el padecimiento clínico que presentaba el paciente, se decidió suministrar la dieta apropiada. Se discriminó la dieta y posteriormente se administró propofol a dosis de 5 mg a 1 mg/kg la dosis total se decidió de acuerdo con la condición física que presentaba el paciente. Se monitoreó frecuencia cardiaca, frecuencia respiratoria, saturación de hemoglobina y medición de escala visual análoga durante todo el proceso de estimulación. Se colectaron los datos y se realizó una prueba de análisis de varianza utilizando un paquete computacional estadístico (SAS). Obteniéndose diferencias significativas (p < 0.05) comparado con el grupo control. Los autores en la presente investigación recomiendan ampliamente la administración de propofol a las dosis antes descritas en perros anoréxicos para el estímulo del apetito inmediato. Por ser una técnica simple, de fácil aplicación, sin efectos colaterales. Disminuyéndose el tiempo de hospitalización, recuperación pronta del paciente. Acompañado de un buen acertado diagnóstico y tratamiento médico.

Palabras clave: Anorexia propofol GABA serotonina.

2004-01-14   |   35,882 visitas   |   9 valoraciones

Vol. 14 Núm.6. Noviembre-Diciembre 2003 Pags. 196-199 Revista AMMVEPE 2003; 14(6)