Autores: Dorantes Álvarez Luis Miguel, Medina Bravo Patricia
No existe una facha exacta para el nacimiento de la ciencia que estudia las hormonas o Endocrinología, pues el hombre ha utilizado desde tiempos inmemoriales los principios de esta ciencia con diferentes objetivos, tales como mantener la calidad y tonalidad de la voz en adultos varones o criar animales de una carne con sabor más delicado. Sin embargo, fue a mediados del siglo XIX que se descubrieron y describieron estructuras anatómicas que no tienen conductos hacia cavidades, y cuya única comunicación es a través de vasos sanguíneos. Esta descripción puramente anatómica incluyó a: tiroides, bazo, glándulas suprarrenales y ganglios linfáticos. En 1852, Carpenter, en su Enciclopedia de Anatomía y Fisiología, escribe que los productos de las glándulas están destinados a volver a la circulación, y las glándulas participan en la asimilación de los materiales que están destinados a convertirse en tejidos organizados.
2006-01-11 | 2,878 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 62 Núm.5. Septiembre-Octubre 2005 Pags. 307-309 Bol Med Hosp Infant Mex 2005; 62(5)