Fragmento

El tubo neural es una depresión del ectodermo en el embrión, que se cierra como un tubo resultando en el mesoderma y separado del ectodermo que formará la piel. Del mesoderma, en tanto, se formará la envoltura meníngea, las vértebras y los músculos. Un defecto en el cierre del tubo neural, en su rafe posterior, mantiene ligazón con el ectoderma-piel e impide que el tubo sea totalmente englobado por el mesoderma. De esta manera puede dar una amplia variedad de lesiones que en conjunto se llaman disrrafias. Las disrrafias se clasifican según si se comunican con el exterior o no, en abiertas y cerradas, constituyendo urgencias absolutas o relativas respectivamente. Son generalmente de resolución quirúrgica debido a la gran cantidad de complicaciones que derivan de dicha patología, entre las que se cuentan meningitis, compresión medular y de raíces nerviosas y tracción medular con anclaje, entre otros. Se presenta el caso de un recién nacido de sexo femenino que presenta una disrrafia oculta tipo médula anclada, de presentación atípica y que requirió de un exhaustivo y prolongado estudio por parte del grupo de médicos que participaron del análisis.

Palabras clave: Disrrafia lipomielomeningocele hipoplasia mielomeningocele malformación médula espinal

2006-04-21   |   5,665 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 1 Núm.1. Enero-Diciembre 2005 Pags. 39-42 REVISTA SCEMUSS 2005; 1(1)