Autores: Gómez Carro Salvador, Ortiz Alcaraz Martín L, Jiménez Ríos Eusebio, De los Santos Briones Saúl, Marín Pech Enrique
Introducción: En 1998 en Yucatán se registró el último caso de rabia humana transmitido por perro. En 2001 ocurrió el primer caso en una niña de 4 años transmitido por un animal silvestre, pero sin reportarse ningún caso en humanos por agresión directa de vampiro. Caso clínico epidemiológico: Se estudió a una menor de 12 años fallecida por un síndrome febril y de encefalitis viral que se sospechó por virus rábico, aún sin el antecedente o evidencia de agresión por algún animal. Se obtuvo la cobertura de vacunación antirrábica de perros y gatos de la localidad afectada, realizando estudio de los contactos y de las condiciones de la vivienda y áreas aledañas. Discusión: Se identificó como probable causa la mordedura inadvertida de un vampiro, facilitada por una vivienda precaria colindante a una cueva de quirópteros. El diagnóstico se confirmó postmortem por el Instituto Nacional de Referencia Epidemiológica reportando la variante antigénica V5 de murciélago hematófago. Se destaca la importancia de realizar acciones preventivas en la comunidad ante la sospecha del diagnóstico de rabia humana. Se concluye que es necesaria la vigilancia zoonótica colateral para detectar nichos de murciélagos hematófagos en localidades rurales.
Palabras clave: Caso de rabia humana murciélago hematófago virus de la rabia.
2006-08-16 | 4,644 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 17 Núm.2. Abril-Junio 2006 Pags. 118-122 Rev Biomed 2006; 17(2)