Autor: Alonso Fernández Francisco
La maravillosa facultad existencial denominada libertad o voluntad libre no se puso en órbita hasta el siglo XIX, hecho que ocurrió entonces merced a la imposición del pensamiento empírico sobre el pensamiento trascendentalista hegemónico de siempre. Este descomunal giro experimentado por la actitud cultural prevalente que condujo a sustituir el “libre albedrío” entelequia metafísico religiosa por el ente racional de la libertad, fue obra de los pensadores ilustrados franceses y los idealistas alemanes. La libertad se ha incorporado al mundo de las ideas como una especie de buque fantasma. Nadie se re cata en hablar de este moderno emblema humano, pero la mayoría de las veces se hace para dedicarle un comentario fantasioso o disparatado, como, por ejemplo, al presentar esta facultad como un atributo múltiple o doble, en forma de un haz de libertades o de una libertad positiva y otra negativa, o como una licencia sociopolítica. En este manual se ofrece de primera mano una sistemática antropológica de la libertad, donde se describe este supremo valor humano como una facultad psicosocial unitaria que surge en el interior de la persona y posee una dilatada proyección ambiental. Sus tres secuencias básicas se sistematizan como la capacidad de elección, el autocontrol y la libertad de acción.
2007-10-29 | 1,337 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 8 Núm.3. Diciembre 2006 Pags. 208 Inv salud 2006; VIII(3)