Autores: León Pérez David, Larrondo Muguercia Hilev
Las especies reactivas del oxígeno intervienen en un sinnúmero de enfermedades y producen daño directo o indirecto a diferentes órganos. En el paciente críticamente enfermo se observa un conjunto de afecciones entre las que se tomaron como ejemplo el síndrome de distrés respiratorio del adulto, el infarto agudo del miocardio y los accidentes cerebrovasculares isquémicos. El síndrome de distrés respiratorio es una afección inflamatoria aguda donde se altera el endotelio vascular pulmonar con acúmulo excesivo de polimorfonucleares en los espacios intersticiales y alveolares, proceso favorecido por las especies reactivas del oxígeno que ocasionan el daño tisular. El síndrome de distrés respiratorio se produce por múltiples afecciones: politrauma, sepsis, estados de choque, politransfundidos, etc. y siempre con una elevada mortalidad. El infarto agudo de miocardio y los infartos cerebrales son un ejemplo de enfermedades donde está presente el síndrome de isquemia-reperfusión y se produce el daño tisular lo que provoca una lesión isquémica que compromete la capacidad para controlar el metabolismo de oxígeno. En la fase de reperfusión hay una liberación excesiva de especies reactivas del oxígeno que al interactuar con la membrana celular desencadenan el llamado proceso de peroxidación lipídica, destrucción y muerte celular.
Palabras clave: Estrés oxidativo especies de oxígeno reactivo cuidados críticos síndrome de dificultad respiratoria del adulto infarto del miocardio infarto cerebral metabolismo peroxidación de lípido muerte celular.
2003-01-21 | 901 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 19 Núm.3. Septiembre-Diciembre 2000 Pags. 196-198 Rev Cubana Invest Biomed 2000; 19(3)