Autores: Castelán Pedraza Jorge Armando, Magaña Mario
Introducción: Hay situaciones en dermatopatología en las cuales la dermis papilar está alterada y es capaz de inducir una respuesta epitelial en la dermis adyacente o el epitelio anexo, similar en apariencia a las estructuras epiteliales embrionarias primarias. Esto ocurre en el dermatofibroma en el que es frecuente encontrar hiperplasia epidérmica, melanocítica, sebácea e inducción folicular, esta última puede ser tan prominente que las yemas de folículos pilosos parezcan un carcinoma basocelular superficial Material y método: Se extrajeron los casos de dermatofibroma de los archivos del laboratorio del Centro de Dermatología & Dermatopatología de la Ciudad de México, estudiados en el año 2009 y se seleccionaron aquéllos con inducción folicular y/o hiperplasia epidérmica. Se estableció la siguiente gradación: + hiperplasia epidérmica solamente, ++ hiperplasia epidérmica con indicios de estructuras anexiales o basaloides, +++ identificación clara de estructuras anexiales. Resultados: Encontramos 21 casos de dermatofibroma. De edades entre 29 y 75 años, 16 mujeres y cuatro hombres; cada persona con una lesión y sólo una con dos dermatofibromas. La topografía más frecuente fue en las extremidades inferiores con ocho pacientes; interesantemente 10 dermatofibromas en el lado derecho y seis del lado izquierdo. Tres dermatofibromas no exhibieron cambios epidérmicos, 9 +, 5 ++ y 4 +++. Discusión y conclusiones: Los cambios inductivos son bien reconocidos en el dermatofibroma, aunque han sido interpretados de diferentes formas. Desde nuestro punto de vista, las proliferaciones basaloides que semejan a carcinomas basocelulares y que se encuentran sobre dermatofibromas son en realidad folículos pilosos en diferentes grados de desarrollo inducidos por la proliferación subyacente de células mesenquimales y sustancia fundamental.
Palabras clave: Dermatofibroma hiperplasia epidérmica e inducción folicular.
2010-06-22 | 6,860 visitas | 6 valoraciones
Vol. 9 Núm.1. Enero-Diciembre 2009 Pags. 11-15. Actas Dermatol 2009; 9(1-4.)