Autores: Lima Gómez Virgilio, Rodríguez González Minette Leticia
La evaluación clásica del ojo traumatizado comprende buscar intencionadamente lesiones específicas, lo que limita su detección; se desconoce la proporción de lesiones oculares que pueden detectarse mediante búsqueda intencionada en un primer contacto. Objetivo: Identificar las lesiones más frecuentes en cada tipo de la clasificación estandarizada de trauma ocular y determinar la proporción que podría detectarse sin equipo especializado. Material y método: Se revisaron las interconsultas oftalmológicas por trauma de enero de 1996 a julio del 2000 y se registraron las lesiones encontradas en cada ojo. Cada caso fue recalificado según la clasificación estandarizada de trauma; para cada tipo de la clasificación se determinó qué porcentaje representaban las lesiones que requerían de instrumental especializado para su detección. Resultados: Se evaluaron 437 ojos; 26 presentaron trauma abierto (5.9%) y 411 cerrado (94.1%). En trauma cerrado tipo A podía detectarse el 62.9% de las lesiones, en cerrado tipo D el 78.8%. En trauma abierto tipo B podía detectarse el 91.9% de las lesiones y en abierto tipo C el 66.6%. En el resto de los tipos podían detectarse todas las lesiones. Discusión: La proporción de lesiones que podía detectarse en un primer contacto alcanzó el 100% en trauma con globo abierto tipo A y 91.9% en tipo B; en trauma cerrado tipo A, un tercio de las lesiones requería del especialista para su detección participación. La clasificación estandarizada, al hacer una evaluación anatómica y funcional, permite detectar ojos con daño aún cuando no se identifiquen las lesiones específicas causadas por el traumatismo.
Palabras clave: Clasificación estandarizada trauma ocular.
2010-11-05 | 1,077 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 6 Núm.2. Mayo-Agosto 2003 Pags. 49-54 TRAUMA 2003; 6(2)