Heridas por proyectil de arma de fuego al sistema nervioso central.

Parte II 

Autores: Pedroza Campo Alfredo, Villarreal Mondragón Andrés

Fragmento

Manejo neuroquirúrgico: Se discute a continuación como debe ser manejada la herida de cuero cabelludo, los objetivos de la cirugía, los criterios de cirugía basados en la GCS y en los hallazgos tomográficos, el tratamiento de lesiones vasculares a causa del proyectil y las indicaciones de la craniectomía descompresiva. Manejo de la herida de cuero cabelludo: Las heridas de cuero cabelludo se deben tratar de inmediato para evitar la infección y la pérdida de sangre. Deben ser lavadas copiosamente con solución salina normal y evitar la contaminación retirando pelo, detritus y objetos extraños. Si hay exposición de cerebro se debe irrigar con la misma solución a una altura de 30 cm. Posteriormente a la limpieza inicial, se efectúa desbridamiento del tejido y cierre hermético de la piel con sutura y/o grapas quirúrgicas. El objetivo es convertir una herida abierta sucia en una herida cerrada limpia. Si la herida es muy grande o el paciente ha presentado un escalpe o existe una hemorragia de piel difícil de controlar se aconseja colocar un vendaje compresivo antes de remitir al paciente o antes de llevar a sala de cirugía. Objetivos de la cirugía: Los objetivos quirúrgicos en herida por proyectil son la evacuación de hematomas intra y/o extracerebrales, la evacuación de contusiones hemorrágicas que representen peligro o estén produciendo un síndrome de herniación o un síndrome de compartimiento (lesiones temporales y cerebelosas), retiro de esquirlas óseas y de proyectil si se encuentran al alcance del área quirúrgica sin ir en su búsqueda en áreas profundas o lejanas, exposición de la duramadre sana y cierre hermético con duraplastia, tratamiento de senos paranasales cuando al paso del proyectil son fracturados o destruidos y se comunican con el compartimiento intradural, lavado y desbridamiento de los tejidos blandos contusos extracraneanos y finalmente cierre hermético por planos (músculo, tejido subcutáneo, piel) (fig 8, 9). Con lo descrito logramos aislar de nuevo el SNC, controlar la hipertensión endocraneana, tratar las fístulas de LCR y prevenir las infecciones. En términos generales se aconseja no evacuar contusiones cerebrales que se encuentran en áreas funcionales como las áreas motora, sensitiva, visual y áreas del lenguaje.

Palabras clave: Arma de fuego sistema nervioso central.

2011-06-10   |   1,218 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 18 Núm.1. Enero-Marzo 2011 Pags. 32-45 Neurocien Colom 2011; 18(1)